Estoy aguantando estoicamente la crisis económica, la de la construcción, la energética, la laboral, la política, la financiera, la editorial, la radioactiva, la de los ideales, la de la infertilidad masculina, la de los esquimales en Alaska, la de las vocaciones religiosas, la de fugas de cerebros, la inmobiliaria, la bioclimática, la bioética, la de la música contemporánea, la del cine español, la de los cuarenta, la del Real Madrid...
¡Pero la del pepino no!
¡¡La del pepino español noooo!!
¡¡¡Esa sí que nooooooooo!!!
A ver si Monsieur Laurent también se va a tener que indignar.
Indígnese, Monsieur, que los pepinos de mi España están por los suelos. ¿Dónde iremos a parar? O tempora, o mores.
ResponderEliminarBesos risueños (si no fuera por las risas, Monsieur).