Ya están aquí,
un año más,
todos ellos,
sin excepción:
Las horribles lucecitas;
el cabrón del amigo invisible;
la mortificante cena de empresa;
la bruja de oro de los cojones;
el jodido ejército de Papá Noeles
escalando por nuestras fachadas;
escalando por nuestras fachadas;
los insoportables villancicos;
los malditos Reyes magos
y sus putos camellos;
el indigesto turrón;
los malditos Reyes magos
y sus putos camellos;
el indigesto turrón;
el consumismo histérico;
las felicitaciones hipócritas...
Comprobado está que no hay manera de librarse,
así que cualquier lucha será infructuosa, pero hay una opción,
al menos divertida, que podéis llamar "la felicitación de Monsieur
Laurent" y que consiste en responder ¡FELICES MIERDAS!
cada vez que alguien os felicite las fiestas.
así que cualquier lucha será infructuosa, pero hay una opción,
al menos divertida, que podéis llamar "la felicitación de Monsieur
Laurent" y que consiste en responder ¡FELICES MIERDAS!
cada vez que alguien os felicite las fiestas.
Pues eso: ¡Felices mierdas a todos!