Hoy comienzan las votaciones para la nueva Diagonal de Barcelona y resulta indignante que el Ayuntamiento de la ciudad haya desestimado la opción D que en su día presentó Monsieur Laurent y que aquí os describimos.
El proyecto en cuestión consistía en hacer dos vías paralelas al trazado actual que se conectarían en el sector Glorias de forma periférica a la acutal plaza como si de un glande se tratara, y en arco de circunferencia abierta a modo de bolsa escrotal en el sector de Francesc Macià.
De esta manera el tráfico rodado y de tranvías, junto con los peatones, bicicletas y otros vehículos terrestres de tracción animal o mecánica, circularían por estas nuevas arterias, y el viejo trazado se convertiría en un gran canal a modo de uretra para embarcaciones, nadadores y otros objetos flotantes que por medio de un potente geiser eyaculante comunicaría el tráfico fluvial del río Llobregat con el puerto del Fórum y el Besós a modo de flujo seminal, para conseguir de esta forma una red de comunicaciones a nivel metropolitano completamente empalmada (que, al parecer, es de lo que se trata).
Resulta absolutamente increíble pensar que las autoridades municipales hayan despreciado esta opción viniendo de un técnico reconocido en el sector, de trayectoria avalada por años de experiencia profesional en el campo de la arquitectura a gran escala y del ejercicio impecable y exitoso en los más intrincados retos del urbanismo internacional, y eso que estaba dispuesto a no cobrar ni un céntimo en comisiones por adjudicaciones y contratas (que, al parecer, es de lo que no se trata).
Está claro que corren malos tiempos para la honrada y genial creatividad. Por ello Monsieur Laurent os recomienda que manifestéis vuestra protesta dibujando en rojo un cipote gigante en las papeletas al ejercer vuestro derecho a voto en este curioso referéndum que va a costar a la ciudad la nada despreciable suma de tres millones de euros.
Qué lástima me da el no estar en Barcelona para dibujar un cipote rojo gigante en una de esas papeletas. No entiendo, con lo bien estructurado que está todo lo que usted, Monsieur, ha planteado, que dejen en manos de otro lo de la Diagonal. Pero no se preocupe, que más tarde o más temprano, algunos se llevarán las manos a la cabeza por no haber considerado su opción y usted podrá agarrar el diseño de su cipote rojo y exclamar: ¡se lo dije!
ResponderEliminarEste es uno de los blogs más divertidos que he visto, Monsieur, ¡felicidades!
Es más que consolador, ¡reconfortante!, contar con seguidoras como tú, amiga Severinne.
ResponderEliminarEstoy convencido de que Monsieur Laurent no ha dicho aún su última palabra dentro del urbanismo patrio, pero el problema es que ya se trate de la última o de la primera, parece ser que esos señores tan serios no están por la labor. Peor para ellos.
Me alegro de que te hayas divertido. Perseveraré para que no decaiga, y aquí me quedo blandiendo mi diseño.
Gracias por dejar tus comentarios que tanto bien hacen a este blog, humilde servidor de la caspa.
Buenos días, monsieur! Hoy he escuchado en la cadena Ser que el referéndum para tan magna obra sólo obtuvo un 12% de participación, y que el 80 % de los votos fueron contrarios a lo que proponía el ayuntamiento. Menudo despilfarro en estos tiempos.
ResponderEliminarUsted siga blandiendo su diseño, que visto lo visto, seguro que triunfaba.
Salud, monsieur.